Chiapas: Bitácora al final de septiembre
Mientras en general los tres poderes de la República poco hacen por la sociedad chiapaneca, y mientras el “presidente saliente” continúa otro show mediático y en medio el debate sobre democracia anhelada y una presunta nueva dictadura partidista, mueren niños, civiles, soldados, criminales.
La sociedad celebra algunas pocas acciones, como detenciones y desarticulaciones de algunos grupos criminales, pero ínfimos para la magnitud de lo que sucede en Chiapas.
Se mantiene la inseguridad. La sociedad y los trabajadores judiciales protestan, se manifiestan. Pero parecen desoídos por las instituciones y el gobierno. Mientras, aparecen otros grupos de autodefensas. Y todos se pretenden erigir en protectores ante la real inutilidad de las fuerzas que debieran garantizar el orden y la seguridad sociales. Pero mucho tiende a esa frontera difusa entre los que defienden y los que delinquen.
Al parecer como parte de pretender alguna acción, se empiezan a ver algunas operaciones entre el ejército, la FGR, o SEDENA. Pero nada es suficiente pues no resultan operativos fuertes, que barran con el crimen. Parece parte de un espectáculo ante un fenómeno fuera de control.
Niña de tres años muere calcinada tras secuestro de su padre.
Otra tragedia sacudió a Berriozábal, Chiapas, cuando una niña de tres años murió calcinada luego de que hombres armados secuestraron a su padre y prendieron fuego a su vivienda, según informaron fuentes policíacas. El fatídico evento ocurrió la mañana del viernes 13 de septiembre, en una comunidad colindante con Tuxtla Gutiérrez.
De acuerdo con los primeros reportes, los individuos armados irrumpieron en el domicilio familiar y se llevaron por la fuerza al padre de la menor. Posteriormente incendiaron la casa y la niña quedó atrapada a en su interior. La madre de la menor no se encontraba en el lugar, estaba trabajando. El cuerpo de la pequeña fue encontrado sobre los resortes de un colchón calcinado, testimonio del horror.
La Fiscalía General del Estado (FGE) informó a través de un comunicado que ha iniciado las investigaciones correspondientes, siguiendo los protocolos establecidos para los delitos de privación ilegal de la libertad y homicidio. Un equipo multidisciplinario de la fiscalía se desplazó a la zona con el objetivo de recabar pruebas y testimonios que permitan esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia.
Hasta el momento, no se han revelado más detalles sobre el paradero del padre de la menor ni sobre los posibles motivos detrás del secuestro y el ataque incendiario. Las autoridades continúan con las pesquisas en Berriozábal, en un esfuerzo por determinar las circunstancias que llevaron a esta tragedia que ha consternado a la comunidad.
La violencia en la región sigue en aumento, y este caso refleja la gravedad de la situación que enfrenta la población local, mientras se exigen acciones contundentes para detener la impunidad y garantizar la seguridad de las familias chiapanecas.
Detención de El Peligro y su vinculación a proceso en Chiapas.
El pasado 19 de septiembre, Marco Aurelio “N”, alias El Peligro, lugarteniente de un grupo delictivo con operación en Chiapas, fue vinculado a proceso tras ser detenido en un operativo coordinado por la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA). El despliegue contó con la participación de diversas autoridades federales y estatales y fue resultado de una investigación derivada de múltiples denuncias por robo de vehículos en la comunidad de Malpaso.
La investigación llevó a las fuerzas de seguridad hasta la zona frailesca de Chiapas, donde se detectó la presencia de los vehículos robados. Durante el operativo de recuperación, en el municipio de Villaflores, se desató un enfrentamiento armado entre las autoridades y el grupo de Marco Aurelio. En medio del intercambio de disparos, un elemento de la Guardia Nacional perdió la vida, aumentando la tensión en la región y acelerando las acciones para capturar a los responsables.
El operativo concluyó con la aprehensión de El Peligro y varios de sus cómplices, quienes fueron presentados ante el Juez de Control en el Centro de Justicia Penal Federal de Cintalapa. Durante la audiencia, el juez dictó auto de vinculación a proceso para Marco Aurelio y sus colaboradores: Víctor Joaquín M., Francisco G., Iván Eduardo R., Selvin J., Nery Humberto C., y Maynom “N”. A todos ellos se les imputó la posesión de armas de fuego, cartuchos y cargadores de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea, conforme a la Causa Penal *62/2024*.
Entre los implicados también figura Abimelex “N”, quien fue vinculado a proceso por los mismos delitos, incluyendo la portación de armas de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas. El juez determinó que todos los detenidos permanecerán en prisión preventiva justificada mientras se lleva a cabo la investigación complementaria, para la cual se fijó un plazo de tres meses.
Este caso pone en evidencia la presencia y actividades ilícitas de grupos delictivos en la región frailesca de Chiapas, lo que ha generado un clima de inseguridad y violencia. La vinculación de Marco Aurelio y su grupo es considerada un paso importante en los esfuerzos por restaurar la paz y la seguridad en la zona. Sin embargo, la muerte del elemento de la Guardia Nacional ha encendido nuevamente el debate sobre la necesidad de reforzar las estrategias de seguridad en el estado.
Se espera que en las próximas semanas las autoridades esclarezcan más detalles sobre las actividades delictivas del grupo liderado por El Peligro y los alcances de su red criminal en Chiapas.
Trabajadores del Poder Judicial de la Federación se manifiestan durante el informe de gobierno del Dr. Rutilio Escandón.
En medio del informe de gobierno del Dr. Rutilio Escandón Cadenas, gobernador del estado de Chiapas, presentado el 23 de septiembre en el Congreso del Estado en Tuxtla Gutiérrez, integrantes del Movimiento de Trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF) del Vigésimo Circuito de Chiapas, se manifestaron exigiendo atención a diversas problemáticas, entre ellas la situación de los desplazados por la violencia en la entidad.
La protesta comenzó a las nueve de la mañana, cuando un grupo de trabajadores, vestidos de blanco, marcharon desde el emblemático Parque de la Marimba hasta el Congreso del Estado, donde se llevaba a cabo la sesión solemne. La manifestación ocurrió a escasos 100 metros del recinto legislativo, que estuvo fuertemente custodiado por al menos 300 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana de Chiapas, quienes acordonaron y cerraron el acceso en un perímetro de dos cuadras a la redonda para garantizar la seguridad durante el evento.
Con altavoces, los trabajadores del PJF lanzaron consignas dirigidas directamente al gobernador Escandón Cadenas, exigiendo que saliera del recinto para escuchar sus demandas. Los manifestantes también alzaron la voz en nombre de las personas desplazadas del municipio de Chicomuselo, Frontera Comalapa, en la Sierra Madre de Chiapas. Según denunciaron, al menos 300 habitantes de esa región han sido forzados a abandonar sus hogares debido a la violencia generada por el crimen organizado, buscando refugio en Guatemala.
A una sola voz, los manifestantes clamaban por paz, reflejando la creciente preocupación ante la ola de violencia que azota al estado, particularmente en la zona de la Frailesca, donde los conflictos armados han terminado con la tranquilidad de sus habitantes. Con el lema “¡Queremos paz!”, los trabajadores exigieron que las autoridades estatales tomen medidas urgentes para frenar la violencia y proteger a los ciudadanos.
La manifestación transcurrió de manera pacífica, sin incidentes mayores, mientras las fuerzas del orden mantuvieron el control de la zona. Sin embargo, la demanda de los trabajadores del PJF y la denuncia sobre los desplazamientos forzosos siguen latentes, en espera de una respuesta oficial del gobierno chiapaneco.
Ejército Civil Indígena de Pantelhó se enfrenta al grupo “El Machete” y advierte su expulsión del municipio.
A través de un video difundido en redes sociales, se ha visto a un grupo de alrededor de 40 hombres fuertemente armados y con pasamontañas, identificados como el Ejército Civil Indígena de Pantelhó, recorriendo los alrededores de la cabecera municipal de este municipio en Chiapas. El grupo, autodenominado defensor de la seguridad local, ha emitido una advertencia directa: el grupo de autodefensas conocido como “El Machete” ya no tiene lugar en Pantelhó.
El Ejército Civil Indígena ha asegurado que su principal compromiso es mantener la paz y la seguridad en Pantelhó, declarando que continuarán realizando patrullajes en la zona para evitar cualquier ataque armado de “El Machete”. Este grupo, según ellos, ya no es bienvenido en la comunidad: ha influido sobre el concejo municipal y está involucrado en actividades criminales.
“El Machete” ha sido señalado en varias ocasiones por su implicación en hechos violentos regionales, algo que el Ejército Civil Indígena no tolerará más pues su misión, han afirmado, es proteger al pueblo hasta que el gobierno restablezca el orden y acabe con lo que consideran un régimen de delincuentes.
A pesar de estar armados y patrullando la zona, el Ejército Civil Indígena ha recalcado que su lucha no está dirigida contra el gobierno o las fuerzas federales, como la Guardia Nacional o el Ejército Mexicano. Sin embargo, subrayan que la seguridad proporcionada hasta ahora en Pantelhó es insuficiente, lo que los ha obligado a tomar el control de la protección municipal.
Durante sus declaraciones, los miembros del Ejército Civil Indígena recordaron la desaparición de 21 personas, quienes aseguran eran inocentes, y culparon a “El Machete” de estos crímenes. Según su mensaje, no permitirán que los miembros de ese grupo asuman nuevamente cargos en el municipio, aunque cuenten con el respaldo de funcionarios gubernamentales o de figuras como el sacerdote Marcelo Pérez Pérez, conocido por su cercanía con las comunidades indígenas.
El Ejército Civil Indígena ha dejado un mensaje contundente: mientras mantengan la vigilancia, “El Machete” no será bienvenido en Pantelhó. A pesar de las advertencias y la creciente tensión en la región, el gobierno federal aún no ha emitido un pronunciamiento oficial sobre la situación, dejando en el aire el destino de este conflicto.
Pantelhó sigue siendo escenario de disputas por el control territorial y la seguridad, con grupos armados que asumen roles de protección ante la falta de respuestas claras por parte de las autoridades.
Habitantes de Frontera Comalapa en mega-marcha por paz y seguridad.
El martes 24 de septiembre, alrededor de 18 mil habitantes de diversos ejidos del municipio Frontera Comalapa se congregaron en una multitudinaria marcha pacífica para exigir paz y seguridad. La movilización inició en el desvío Nuevo México y culminó en el Parque Central de la cabecera municipal, localidad fronteriza con Guatemala.
Vestidos de blanco, hombres, mujeres e incluso menores de edad, caminaron aproximadamente seis kilómetros clamando justicia y seguridad. Las consignas de los manifestantes reflejaban el descontento y la angustia ante la ola de violencia que azota a su comunidad. La situación es tan grave que, según informes del Centro de Derechos Humanos “Digna Ochoa”, más de tres mil personas han sido desplazadas en Frontera Comalapa debido a la inseguridad que prevalece en la zona.
Los ejidos San Juan Carrizal 1, Nueva Revolución, Nuevo Mazapa, Costa Rica y Santa Rosa, se unieron en una sola voz para exigir a los tres niveles de gobierno que garanticen la paz y seguridad para todos los habitantes. Estos ejidos están ubicados en áreas consideradas de alto riesgo, lo que incrementa la urgencia de su petición.
Uno de los puntos de la protesta fue solicitar mayor vigilancia y seguridad en los tramos carreteros federales, como el que conecta Comalapa con Motozintla, especialmente en la cabecera municipal de Amatenango-Mazapa de Madero. Los habitantes también demandaron la intervención de las autoridades federales para reforzar la seguridad en la carretera Chamic-Trinitaria hacia Comitán, donde se han registrado desapariciones y robos de vehículos en las últimas semanas.
Frente al Palacio Municipal de Frontera Comalapa, los manifestantes realizaron un mitin político en el que demandaron la intervención de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano. Subrayaron que la movilización tenía como objetivo principal reclamar paz, tranquilidad y seguridad no sólo para las familias locales, sino también para las áreas turísticas como los Lagos de Colón y Los Laureles, que antes eran destinos concurridos pero que ahora sufren la falta de visitantes debido a la violencia.
Un emotivo momento se vivió cuando mujeres, familiares de personas desaparecidas en la carretera Comalapa-Chamic, marcharon portando pancartas con las fotos de sus seres queridos, principalmente hombres, cuya búsqueda sigue inconclusa. Entre lágrimas y con firmeza, clamaban: «Vivos se los llevaron, vivos los queremos«.
Según cifras de la Fiscalía de Justicia de Chiapas, desde 2022 hasta marzo de este año, 63 personas han desaparecido en los municipios fronterizos. En Frontera Comalapa se reportan 24 desaparecidos, en Comitán 20, en La Trinitaria 13, en Amatenango de la Frontera 5 y en Chicomuselo 1. No obstante, los familiares aseguran que la cifra real es mucho mayor.
La marcha de hoy se realizó tres meses después de un violento enfrentamiento entre grupos criminales en el municipio vecino de Chicomuselo, que provocó el desplazamiento de varias familias hacia Guatemala.
“Hoy venimos vestidos de blanco exigiendo paz. Queremos seguridad para nuestro pueblo, por eso estamos unidos. No hay mucha seguridad, pero ya estamos juntos, exigiendo paz en nuestras comunidades y barrios”, declaró Esnaider, uno de los manifestantes.
A pesar de la magnitud de la marcha y de las múltiples peticiones de seguridad, no se observó la presencia de elementos de la Guardia Nacional ni del Ejército Mexicano durante la manifestación. La falta de respuesta gubernamental a las crecientes demandas de protección ha generado un profundo malestar en la población.
Cabe mencionar que, debido a la situación de inseguridad, el pasado 15 de septiembre no se llevó a cabo el tradicional Grito de Independencia en el municipio de Frontera Comalapa, reflejando la crisis de violencia que afecta a la región.
Enfrentamiento en Tapachula entre la FGR, Armada de México y grupo armado deja muertos y heridos.
La madrugada de este miércoles 25 de septiembre la ciudad de Tapachula fue escenario de un fuerte enfrentamiento entre elementos de la Fiscalía General de la República (FGR), la Armada de México y un grupo armado, dejando un saldo preliminar de tres personas fallecidas, dos heridos, entre ellos un marino, y varios detenidos. Los hechos ocurrieron durante dos operativos simultáneos en distintos puntos de la ciudad fronteriza.
El operativo, que comenzó alrededor de las 2:40 de la mañana, incluyó cateos en dos domicilios tras recibir denuncias de la presencia de hombres armados en la zona. El primer enfrentamiento tuvo lugar en una vivienda situada en la 11ª Avenida Norte, entre las calles 13 y 15 Oriente. Al llegar al lugar, los elementos de la Armada de México intentaron ingresar al inmueble, pero fueron recibidos con disparos por parte de los sospechosos, lo que desató un intercambio de fuego.
Durante el tiroteo, un marino resultó herido y fue atendido por paramédicos de Protección Civil, quienes lo trasladaron a un hospital cercano para recibir atención médica. Además, cinco personas fueron detenidas en el lugar como parte del operativo. Las autoridades han señalado que la identificación de los detenidos y su posible vinculación con células delictivas en la región está siendo investigada.
Paralelamente, en otro punto de Tapachula, en la calle Pirules y avenida Tabachines, se registró un segundo enfrentamiento en el que tres personas perdieron la vida, de entre 20 y 28 años, mientras que otras dos resultaron heridas, una de ellas presuntamente perteneciente a las fuerzas federales. Los fallecidos fueron levantados por personal de la Fiscalía de Distrito Fronterizo y trasladados al Servicio Médico Forense en el ejido Álvaro Obregón para su identificación y autopsia.
Este operativo forma parte de una estrategia coordinada entre la FGR y la Armada de México para combatir grupos armados en la región. Durante las acciones, se utilizaron drones para rastrear a los presuntos delincuentes y facilitar su neutralización. Fuentes oficiales indicaron que, tras el abatimiento de tres de los sospechosos en el segundo enfrentamiento, otros integrantes del grupo criminal decidieron rendirse y entregarse a las autoridades para evitar el mismo destino.
Este incidente se suma a los hechos violentos que han sacudido a Tapachula en los últimos meses. La ciudad, por su ubicación estratégica en la frontera sur de México, se ha convertido en un punto clave para el tránsito de migrantes, el tráfico de drogas y el asentamiento de diversas células delictivas, lo que ha intensificado los operativos de las fuerzas federales en la región.
Además, se han reportado otros tiroteos en colonias cercanas a los sitios del enfrentamiento, aunque no se ha confirmado si estos se relacionan con el operativo. Hasta el momento, las autoridades federales y estatales han mantenido un hermetismo en torno a los detalles de las operaciones, pero se espera que en las próximas horas emitan un comunicado oficial con más información sobre el saldo final de muertos, heridos y detenidos.
El violento enfrentamiento ha aumentado la preocupación entre los habitantes de Tapachula, quienes denuncian la creciente inseguridad que viven. Organizaciones civiles y defensores de derechos humanos han expresado su inquietud por el uso de la fuerza en estas operaciones, así como por el impacto que estos eventos violentos tienen en la población civil.
A medida que las investigaciones continúan, las autoridades trabajan para determinar la identidad y los antecedentes del grupo armado involucrado, así como su relación con otras actividades delictivas en la región. Este operativo conjunto entre la FGR y la Armada de México refleja el creciente enfoque de las autoridades federales en la lucha contra el crimen organizado en el sur del país, en un intento por recuperar el control de zonas afectadas por la violencia y el narcotráfico.
Se espera que en próximas horas el Gobierno Federal emita más detalles sobre el resultado de estos operativos, y las acciones que seguirán para garantizar la seguridad en Tapachula y sus alrededores.