Veracruz: El destino de los portuarios, en manos de la presidenta

El expresidente Andrés Manuel López Obrador, quien terminó su mandato el 30 de septiembre último, dejó pendiente la solución del conflicto laboral que desde 1991 enfrentan los trabajadores portuarios de Veracruz, a pesar de que en cinco conferencias mañaneras prometió justicia. Simplemente no cumplió. Es posible que no haya tenido tiempo.

Ahora Alejandro Pulido Cueto, el dirigente de los obreros maniobristas, expresa que confían en la presidenta Claudia Sheinbaum para que esa justicia pendiente llegue al gremio portuario.

Pulido Cueto también confía en la gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, a quien ya le presentó un proyecto de inversión multimillonaria para el muelle número 9, cuya concesión pertenece al sindicato de maniobristas, otorgada desde los años cuarenta del pasado siglo a través de un laudo laboral, el cual no puede deshacer ninguna autoridad.

Dicha concesión [agrega Pulido Cueto] nos pertenece y con ella estamos tramitando inversiones para el puerto de Veracruz, desde Europa y Estambul, y necesitamos que las autoridades federales nos apoyen para que esos recursos lleguen a nuestro estado y así se generen fuentes de empleo, como ocurría hasta 1991. Después de la requisa que decretó el entonces presidente Carlos Salinas, que fue ilegal y ya está probado, Veracruz entró en severa crisis. Es urgente que el estado levante económicamente.” Sostiene Pulido.

El proyecto de inversión en el muelle 9 ya está en manos de la gobernadora electa de Veracruz, Rocío Nahle, pero hace falta [dice Pulido] que la mandataria del estado de Veracruz lo presente ante las instancias federales para que haya apertura a esta cuantiosa inversión que, inicialmente, será de cien millones de dólares y en el transcurso del año 2024.

La inversión extranjera [apunta] llegará a finales de ese año a 300 millones y en adelante el monto sería de 500 millones de dólares. Este paso se dará después en diciembre de este año, cuando Nahle tome posesión como gobernadora de Veracruz.

Desde varios años, el dirigente del sindicato de maniobristas negocia con el gobierno federal la devolución de los bienes que perdieron en 1991, cuando Carlos Salinas de Gortari decretó la requisa al puerto de Veracruz. Treinta y tres años después esa requisa fue declarada ilegal. En realidad se trató de un negocio con el que se quedaron el propio Salinas, Dante Delgado y Carlos Slim.

Los trabajadores maniobristas piden a la presidenta Claudia Sheinbaum que se les devuelva el patrimonio que les decomisaron: cuentas bancarias, edificios, maquinaria (que explotaron las empresas que impuso Salinas) una bodega en la avenida Netzahualcóyotl en el puerto de Veracruz, entre otras propiedades.

También piden al gobierno federal pensiones para los trabajadores. Antes de concluir el gobierno de López Obrador les autorizaron sólo 16, de las más de 500 que Pulido plantea necesarias para trabajadores portuarios y herederos. También requieren casas. En este rubro ya les otorgaron algunas viviendas, pero aún faltan para cubrir la demanda de los trabajadores.

Por otra parte, está pendiente la devolución de las cuentas bancarias del sindicato de maniobristas que el SAT se ha negado a entregar. Dichas cuentas en 1991 estuvieron “sudando” en la empresa financiera de Pedro Aspe, quien fuera el secretario de Hacienda y Crédito Público durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari y se considerara el máximo representante del proyecto económico ejecutado durante ese sexenio. Actualmente, las cuentas están concentradas en Banamex.

Lo que le preocupa a Alejandro Pulido es que sigue el hostigamiento en contra de su gremio. En días pasados elementos de la Secretaría de Marina irrumpieron en forma violenta en uno de los edificios propiedad de los trabajadores, ubicado en la avenida 16 de Septiembre del puerto de Veracruz.

Dice Pulido Cueto que los efectivos de la Marina violaron chapas del edificio y se afincaron dentro de esa propiedad en clara provocación, y hasta ahora el gobierno federal no ha explicado las razones de la invasión.

–¿Consideras que al expresidente Andrés Manuel López Obrador le valió madres el conflicto portuario de ustedes? –Se le pregunta al dirigente del sindicato de maniobristas.

No, para nada. Creo que al expresidente ya no le dio tiempo solucionar nuestro asunto. Y por ello, estamos tratando el tema con la actual presidenta, la señora Claudia Sheinbaum. Todos los trabajadores confiamos en ella y pronto vamos a resolver nuestro tema.

Alejandro Pulido Cueto, dirigente de los obreros maniobristas del puerto de Veracruz. Imagen: Cortesía del autor. Procesada por OjodeHipopótamo.

Y añade:

–Necesitamos que Veracruz renazca, que vuelva a ser una potencia económica. Tenemos todo para ello porque las inversiones no sólo serán para el puerto de Veracruz sino para Coatzacoalcos, Tuxpan, y queremos que se extienda hasta Alvarado. En este municipio queremos hacer un gran puerto. Y estamos trabajando con el International Dockworkers Council (IDC o Consejo Internacional de Trabajadores Portuarios en español) a nivel de Europa y Estados Unidos, del cual formamos parte y nos respaldan.

En el muelle número 9 –cuya concesión le pertenece al sindicato de maniobristas– habrá una fuerte inversión. Es posible que Pulido Cueto arranque antes de que termine el año con la inversión inicial de cien millones de dólares.

Ojalá la gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, y la señora presidenta Claudia Sheinbaum, nos apoyen. Eso es lo que les pido: apoyo para los trabajadores y apoyo para que aterricen las inversiones que, dicho sea de paso, son muy necesarias para Veracruz y el país.

Pulido concluye:

Nosotros no queremos conflicto con nadie. Tampoco le queremos quitar el empleo a otras empresas. Nada de eso. No queremos conflicto. Sólo queremos trabajar y que nuestras familias vivan en paz. Lo que necesitamos es trabajo y por ello ofrecemos estas inversiones para el puerto de Veracruz. Espero que nos escuchen.”